CIRUGÍA REFRACTIVA

Cirugía refractiva: el adiós a las gafas y lentes de contacto

La cirugía refractiva es un conjunto de procedimientos quirúrgicos que modifican la anatomía del ojo, eliminando definitivamente los defectos refractivos de la miopía, hipermetropía y astigmatismo para que no sea necesario el uso de gafas o lentes de contacto.

¿Qué es la miopía?

La miopía es un error de enfoque visual que causa dificultad para ver los objetos lejanos, mientras que los objetos cercanos son percibidos sin ningún tipo de problema. Los pacientes miopes suelen tener los ojos más grandes, debido a que la longitud axial del ojo es más grande de lo normal. Como consecuencia de esta característica, la imagen no se enfoca en la retina, sino en un punto por delante de ella, lo que se traduce en una percepción borrosa de la imagen.

¿Qué es la hipermetropía?

La hipermetropía es un error de enfoque visual que provoca una visión borrosa e incómoda de cerca, aunque a partir de cierta edad (aproximadamente 50 años), también se ven mal los objetos lejanos. En el caso de la hipermetropía, la imagen se enfoca detrás de la retina y no directamente sobre ella.

¿Qué es el astigmatismo?

El astigmatismo tiene su origen en el hecho de que la córnea no presenta la misma curvatura en todas sus zonas. La luz incide en varios puntos o ejes, provocando visión borrosa y distorsionada. La anomalía en la estructura de la córnea, responsable del astigmatismo, suele estar determinada genéticamente o bien haber sido provocada por otras causas, tales como traumatismos o intervenciones quirúrgicas. Puede presentarse solo o asociado con miopía e hipermetropía.

Tratamiento

El objetivo de la cirugía refractiva es conseguir una independencia total de las gafas o lentes de contacto, mejorando la calidad de vida y funcionalidad del paciente.

Actualmente, la corrección quirúrgica de la mayoría de defectos refractivos se realiza mediante el láser excímer. Se caracteriza por su elevada eficacia, seguridad y predictibilidad. El láser realiza una ablación de las capas profundas de la córnea, restableciendo su curvatura normal.

Para los casos con defectos refractivos muy elevados, o no candidatos a cirugía láser por las características intrínsecas del ojo, existen otras técnicas alternativas como son el implante de lentes intraoculares fáquicas (tipo ICL®), donde mediante una sencilla cirugía introduce una lente de material sintético, especialmente diseñada para la corrección del defecto refractivo de cada paciente.

Es importante entender que la cirugía refractiva es un procedimiento personalizado que requiere un estudio oftalmológico minucioso previo, determinando la forma y funcionalidad del globo ocular del paciente. Existen unos criterios de selección muy rigurosos que hacen que se excluyan defectos refractivos no estables o problemas oculares asociados.