RETINOPATÍA DIABÉTICA
¿Qué es la retinopatía diabética?
La Diabetes Mellitus es la enfermedad metabólica más frecuente y extendida en todo el mundo y la retinopatía diabética es una de sus complicaciones microvasculares crónicas. En los países desarrollados, la retinopatía diabética se ha convertido en la principal causa de déficit visual y ceguera en adultos entre los 25 y 74 años de edad, afectando tanto a los diabéticos tipo I como a los diabéticos tipo II.
¿Cuál es la causa?
Las complicaciones microvasculares de la diabetes mellitus necesitan entre 5 y 10 años de hiperglucemia mantenida para desarrollarse. Se produce una alteración en la vasculatura normal de la retina causando fugas de fluido (edema macular) y, en ocasiones, hace que los vasos sanguíneos crezcan de forma anormal causando hemorragias en la cavidad vítrea (retinopatía diabética proliferativa).
Síntomas
Los síntomas varían desde la visión borrosa, causada por el edema macular, hasta la visión de manchas que oscurecen la visión de forma parcial o incluso totalmente, causado por la hemorragia vítrea.
El pronóstico visual de estos pacientes lo marcará la presencia de retinopatía diabética proliferativa y edema macular. Es conocido que el riesgo de ceguera en los diabéticos es unas 25 veces superior al resto de la población.
Prevención y tratamiento
La mejor prevención frente a las complicaciones de la retinopatía diabética son los exámenes periódicos realizados por el oftalmólogo especializado en esta patología. El tratamiento actual engloba un control metabólico muy estricto. La fotocoagulación con láser y la administración intravítrea de fármacos antiangiogénicos y corticoides constituyen los pilares fundamentales del tratamiento actual de la retinopatía diabética. La cirugía también tiene su indicación en las formas más avanzadas de la enfermedad.